Ciudad Juárez, Chihuahua.- Un joven de 19 años de edad, fue arrestado esta mañana acusado de asesinar a su padre y a su madrastra, cuyos cadáveres fueron descubiertos ayer en la cajuela de un automóvil, reportó la Fiscalía General del Estado (FGE).
Aparentemente el presunto homicida, identificado como Carlos Sebastián García de Ávila, quiso hacer pasar el doble crimen como si fuera un ajuste de cuentas entre narcotraficantes, ya que envolvió los cuerpos en unas sabanas para luego encajuelarlos, se informó.
Los cadáveres de Juan Carlos García Zubía, de 37 años, y Abigail Castillo, de 36, fueron localizados ayer al interior de la cajuela de un vehículo Mercury Cougar, color café, modelo 1997, que fue encontrado con rastros de sangre y abandonado en una calle de la colonia Morelos.
Los investigadores encontraron en un cuerpo una credencial del trabajo donde se indicaba su domicilio, por lo que se dirigieron al lugar para conocer el entorno social de las víctimas; familiares del occiso refirieron que García Zubía tenía tres hijos de 20, 19 y 14 años, respectivamente, pero que sólo el mayor era independiente, los dos últimos dependían económicamente de la víctima.
Mencionaron que García Zubía tenía tres años de haber empezado una nueva relación sentimental con la señora Abigail Castillo, en la cual no habían procreado familia. Al ser entrevistado el hijo menor refirió que la última vez que vio a su padre fue el lunes por la tarde cuando lo llevó a la escuela a bordo de un automóvil de la marca Nissan, línea Sentra, color gris.
Indicó que por la noche cuando llegó a su vivienda no encontró a su padre ni a su madrastra, pero que vio a su hermano Carlos Sebastián García de Ávila tripulando el carro de la marca Nissan que es propiedad de su papá. Después los agentes investigadores localizaron a Carlos Sebastián García de Ávila al exterior de la vivienda de su novia, quien fue llevado a declarar sobre los hechos.
El hoy arrestado inicialmente refirió que desconocía lo sucedido, pero después de un largo interrogatorio aceptó que fue él quien asesinó a su padre y su madrastra luego de que unas voces que escuchaba en su cabeza le indicaban que lo hiciera. “No me arrepiento, me trataban muy bien, pero no me arrepiento”, dijo Carlos, para luego relatar cómo ocurrieron los hechos.
El joven indicó que escuchaba voces desde hace tiempo, pero no las entendía ya que al parecer eran de otro idioma o lengua, luego, mencionó que el fin de semana pasado sorprendió a su papa piropeando a su novia, cosa que lo molestó pero no dijo nada, sin embargo, relató que el lunes pasado escuchó en su mente un “cántico gregoriano” que lo motivó para cometer los homicidios.
Dijo que la canción gregoriana le decía que los matara, y que él solo obedeció, por lo que ese mismo día esperó a que su padre se fuera a dejar a su hermano menor a la escuela y llamó a su madrastra para decirle que le dolía una muela, por lo que la mujer comenzó a revisarlo y mientras lo hacia él sacó un cuchillo y la apuñalo en repetidas ocasiones hasta privarla de la vida.
Después arrastró el cuerpo al interior de un cuarto y procedió a limpiar la sangre, una hora después, llegó su padre y le pregunto por su esposa, pero en ese momento el joven le pidió que le revisara una herida (cortada) que se había provocado en una mano, cuando su progenitor le revisaba la herida Carlos sacó de entre sus ropas un cuchillo y lo asesinó de la misma manera.
Luego, envolvió los cadáveres con dos cobijas y los subió a la cajuela un vehículo, que es propiedad de su padre y que estaba estacionado en la cochera de su vivienda. Posteriormente, trasladó el vehículo a unas calles de la colonia Morelos en donde lo dejó abandonado. Minutos después regresó a su vivienda a borrar las manchas de sangre y tomó otro automóvil de su papá para ir a ver su novia.
Carlos Sebastián García de Ávila, que actualmente cursa el quinto semestre en la preparatoria Visión Azteca, quedó a disposición del Ministerio Público por su presunta responsabilidad en el delito de homicidio agravado, y en las próximas horas se le realizará la formal imputación ante un Tribunal de Garantía.
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