Cancún, Quintana Roo.- No había nadie con el joven Raúl Caamal Cajum, de 17 años de edad, cuando le dio un ataque epiléptico en el baño de su casa y cayó de cabeza en una cubeta llena de agua. Pasaron varias horas hasta que llegó su hermanastro y lo encontró en esa posición, pero ya era demasiado tarde, había fallecido.
Las autoridades judiciales informaron que los hechos se reportaron a las 14:00 horas del pasado martes, en una de las casas de la colonia irregular La Jungla, que se ubica en la avenida Leona Vicario, hasta donde se trasladaron rescatistas de la Cruz Roja y autoridades de la PGJE, quienes tomaron conocimiento de los hechos.
Los policías se entrevistaron con el hermanastro del ahora occiso, un menor de 12 años de edad, quien dijo que por la mañana de ese día Raúl -que padecía frecuentes ataques de epilepsia- se había quedado solo en la vivienda, que sus papas se habían ido a trabajar y él se fue a la escuela.
Dijo que llegó de la escuela alrededor de las 13:50 horas y al ingresar a su domicilio vio al joven en el baño y con la cabeza dentro de la cubeta, ya no se movía. Salió a pedir ayuda a los vecinos, quienes reportaron los hechos a las autoridades.
La hipótesis que manejaron las autoridades judiciales fue que al joven le dio un ataque epiléptico, al no controlar sus movimientos y perder la conciencia cayó de cabeza en la cubeta de 20 litros llena con agua. Los hechos fueron en el área del baño, donde tienen varias cubetas con el vital líquido.
De acuerdo con los primeros reportes, hechos por peritos de la Procuraduría General de Justicia del Estado, a simple vista no se apreciaban huellas de violencia, lo cual fue confirmado después por la necropsia practicada al cuerpo, misma que reveló que la causa de la muerte fue asfixia por inmersión en el agua y que falleció alrededor de las 08:00 horas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario