NOTA Y FOTO ''LA POLICIACA''
TEPOTZOTLAN.- Tenía la sospecha de que su esposa lo engañaba con otro hombre y al confirmarlo y encontrarla “muy acaramelada” con él, un celoso sujeto sacó de entre sus ropas una arma de fuego y sin las más mínima contemplación lo asesinó a tiros, hechos ocurridos en enero de 2011.
Sin embargo, como resultado de las investigaciones que se realizaron, elementos de la Policía Ministerial lograron ubicar y detener en su domicilio como presunto responsable a Marco Antonio Almazán Ordóñez, al darle cumplimiento a una orden de aprehensión.
Al ser trasladado a las instalaciones del centro de Cuautitlán y una vez que elementos de la Policía Ministerial lo interrogaron, éste aceptó que había asesinado a balazos, a quien identificó como Ulises Fernando López Avila y dijo que lo hizo porque descubrió que andaba con su esposa.
Explicó que ya tenía la sospecha de que su mujer lo engañaba con otro hombre e indicó que el día de los hechos llegó en su auto a un centro comercial donde su esposa trabajaba, ubicado sobre la Avenida López Mateos, en el Barrio de San Martín, en este municipio.
Dijo que grande fue su sorpresa y desilusión cuando la encontró platicando muy “acaramelada” con su rival en amores. El coraje que sintió en ese momento, señaló, fue tanto que sin medir las consecuencias llegó y preso de la rabia sacó un arma de fuego y asesinó a tiros a su rival en amores.
Consumado el asesinato, Marco Antonio tomó del brazo a su esposa y de manera violenta la subió a su auto para darse a la fuga. Declaró que “por el gran amor que le tenía a su esposa” fue que no le disparó a ella y le perdonó la vida.
Confeso de los hechos, el presunto homicida fue consignado de inmediato al penal de Cuautitlán, donde en los próximos días un juez de Control y Juicios Orales determinará su situación jurídica.
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