La empresa Trovan fabrica diminutos chips 
electrónicos que se colocan debajo de la piel del animal, al hacer esto, la 
mascota se registra en una base de datos mundial con la información  del animal 
y su propietario, posteriormente cualquier lector de la empresa, al ser pasado 
sobre la mascota arrojará la información del chip.
El Alcalde 
firmó el contrato de donación con el que Trovan le entrega al Gobierno Municipal 
un lector de radiofrecuencia  con un valor de 2,500 dólares, así como cien chips 
electrónicos, la entrega se hizo luego de gestiones por parte de la Regidora 
Nereida Fuentes González.
Por su 
parte el representante de la empresa, Enrique Maldonado Luce, explicó los 
beneficios de este chip que se aplica mediante una inyección, señalando que se 
podrá contar con un censo de los perros y gatos en la ciudad, así como saber con 
exactitud quién es el propietario de las mascotas que estén deambulando en la 
calle.
Será el 
Departamento Antirrábico el que tendrá el lector y todos los perros capturados 
serán sometidos a una lectura para saber quién es el dueño y en caso de ser 
necesario aplicar las sanciones correspondientes.
El 
Presidente Municipal expresó que la proliferación de perros callejeros es un 
tema de salud pública que le compete tanto a los dueños de los animales como al 
gobierno, agregó que el uso de las nuevas tecnologías reducirá la población de 
perros en el abandono y se promueve la cultura del buen cuidado.
Urbalejo 
Cinco expresó que esto es el inicio de la modernización del servicio antirrábico 
y le corresponde también al ciudadano ser partícipe de estos cambios aplicándole 
a sus mascotas estos chips.
Los cien 
chips entregaos ya están disponibles en el departamento Antirrábico, se espera 
recibir más en el transcurso de los días, sin embargo las personas interesadas 
pueden acercarse a la dependencia ubicada en la colonia Bellavista a solicitar 
información correspondiente.
El 
transmisor es de tecnología Alemana y se utiliza actualmente en los animales del 
zoológico de San Diego y el parque acuático estadounidense Sea World.
La 
colocación del chip no causa ningún daño y queda de manera permanente en el 
animal.
 
 
 
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